PREGUNTAS FRECUENTES
La disfunción eréctil se caracteriza por la dificultad persistente para lograr o mantener una erección lo suficientemente firme para tener relaciones sexuales satisfactorias.
Si experimentas alguno de estos síntomas de manera recurrente, podrías tener disfunción eréctil:
Un gran número de pacientes experimenta mejoras significativas con los tratamientos para la disfunción sexual masculina.
Estos tratamientos son diversos y se pueden ajustar según las necesidades individuales de cada paciente.
Es crucial gestionar adecuadamente condiciones médicas preexistentes, así como controlar el sobrepeso, la diabetes y evitar el tabaquismo.
La eyaculación precoz se refiere a la eyaculación que ocurre con una estimulación sexual mínima y antes de lo deseado. El tratamiento puede incluir técnicas de control de la eyaculación, terapia psicológica y medicamentos.
Mejorar la vida sexual puede implicar comunicación abierta con la pareja, mantener un estilo de vida saludable, manejar el estrés, y buscar ayuda profesional si es necesario.
Los pellets hormonales son pequeños cilindros hechos de hormonas bioidénticas, generalmente estrógeno o testosterona, que se insertan debajo de la piel para proporcionar una liberación gradual y sostenida de hormonas en el cuerpo.
Los pellets se insertan a través de un pequeño procedimiento quirúrgico realizado bajo anestesia local en el consultorio del médico. Se colocan debajo de la piel, generalmente en el área glútea o en el abdomen.
Los efectos de los pellets hormonales pueden durar entre 3 y 6 meses, dependiendo de la dosis y el metabolismo individual del paciente.
Los beneficios incluyen una terapia hormonal continua y sostenida, alivio de los síntomas asociados con desequilibrios hormonales, conveniencia al requerir inserciones menos frecuentes y menos fluctuaciones hormonales.
Los pellets hormonales generalmente contienen estrógeno o testosterona, pero también pueden incluir otras hormonas bioidénticas según las necesidades del paciente.
Los candidatos adecuados incluyen personas que experimentan síntomas asociados con desequilibrios hormonales, como mujeres en la menopausia o hombres con deficiencia de testosterona, y aquellos que buscan una forma conveniente y efectiva de terapia hormonal.
Las condiciones médicas que se pueden tratar incluyen los síntomas de la menopausia en mujeres, la deficiencia de testosterona en hombres, y otras condiciones relacionadas con desequilibrios hormonales.
El procedimiento implica una pequeña incisión bajo anestesia local en el consultorio del médico, seguido de la inserción de los pellets debajo de la piel. Es un proceso rápido y relativamente sencillo.
Los efectos secundarios pueden incluir irritación en el sitio de inserción, cambios en el estado de ánimo, retención de líquidos y sensibilidad en los senos.
Sin embargo, estos efectos suelen ser temporales y pueden ser controlados con ajustes en la dosis hormonal.
Los pellets hormonales ofrecen una liberación gradual y sostenida de hormonas en el cuerpo durante varios meses, mientras que otras formas de terapia hormonal pueden requerir dosis diarias, parches o inyecciones frecuentes.
Los pellets pueden ser retirados mediante un procedimiento quirúrgico similar al de la inserción, y se realiza en el consultorio del médico bajo anestesia local.
La mejoría de los síntomas puede variar según el individuo, pero generalmente se puede notar dentro de unas pocas semanas después de la inserción de los pellets hormonales.
Sí, la dosis de hormonas puede ajustarse según la respuesta del paciente y las necesidades individuales de tratamiento.
Los estudios han demostrado que la terapia con pellets hormonales es segura y efectiva a largo plazo cuando se realiza bajo la supervisión de un médico especialista.
La consulta suele durar aproximadamente una hora, incluyendo la evaluación médica y el procedimiento de inserción de los pellets. Sin embargo, esto puede variar según las necesidades individuales del paciente.
La próstata es una glándula del tamaño de una nuez que se encuentra debajo de la vejiga en los hombres.
Es importante para la salud reproductiva y puede experimentar problemas como la hiperplasia prostática benigna (HPB) o el cáncer de próstata.
Los síntomas pueden incluir dificultad para orinar, micción frecuente, micción nocturna frecuente, sensación de vaciado incompleto de la vejiga, chorro débil de orina, dolor al orinar, sangre en la orina o semen, entre otros.
La HPB es un agrandamiento benigno de la próstata que puede causar síntomas urinarios.
El tratamiento puede incluir medicamentos, terapia láser, cirugía mínimamente invasiva o cirugía tradicional, dependiendo de la gravedad de los síntomas.
Los factores de riesgo incluyen la edad avanzada, antecedentes familiares de cáncer de próstata, raza (los hombres afroamericanos tienen un mayor riesgo), dieta rica en grasas y obesidad.
Los síntomas comunes de una infección del tracto urinario incluyen dolor o ardor al orinar, necesidad frecuente de orinar, dolor en la parte baja del abdomen y orina turbia u oscura.
Los factores de riesgo incluyen la deshidratación, la dieta rica en sal o calcio, antecedentes familiares de cálculos renales, ciertas condiciones médicas y algunos medicamentos.
Los síntomas pueden incluir dificultad para orinar, sensación de urgencia para orinar, micción frecuente, incontinencia urinaria, dolor al orinar, sangre en la orina y sensación de vaciado incompleto de la vejiga.
La incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de control sobre la vejiga, lo que resulta en fugas de orina.
Las causas pueden incluir debilidad de los músculos del suelo pélvico, daño en los nervios que controlan la vejiga, infecciones del tracto urinario y otras condiciones médicas.
El tratamiento puede incluir ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico (como los ejercicios de Kegel), medicamentos, dispositivos médicos (como los dispositivos de pesario), terapia conductual, cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, cirugía.